Autora: Belén Segarra
¿Dónde empieza y termina la casa en un mundo global? Compramos ropa barata que se producen en otros países en condiciones de miseria, consumimos sin tener en cuenta el impacto ambiental, vendemos armas que alimentan conflictos en los países empobrecidos… y para “compensar” en la Comunitat Valenciana se dedica menos del 0,2 % de los presupuestos a la cooperación internacional. ¡El 99,8 % ya es para nosotros!
¿De verdad queremos vivir en un mundo tan injusto y desigual?